La economía digital es una actividad que puede aplicarse a todos los sectores productivos, tanto bienes como servicios, y proporciona a través de la red un acceso a la información sin precedentes a todos los agentes económicos (consumidores, empresas y sector público). También está transformando el mundo de las relaciones sociales y personales y, en consecuencia, al conjunto de la sociedad.

Según la Comisión Europea, la economía digital tiene un gran potencial de crecimiento en Europa, dado que el 41% de las empresas no han iniciado sus procesos de digitalización y sólo el 2% aprovecha al máximo las oportunidades digitales.

En España, la economía digital se está desarrollando con rapidez, pero todavía no alcanza los estándares de otros países europeos. El peso del sector TIC en nuestra economía tanto en términos de PIB como en empleo está por debajo de la media de la OCDE y de buena parte de los países europeos, y eso se manifiesta en el peso de este tipo de bienes y servicios en nuestras exportaciones. Así, según la OCDE, las TIC aportan en torno al 4% del Valor Añadido y del empleo en nuestro país, frente al 5,5% de media de la OCDE.

En otros ámbitos de la economía digital y centrándonos en las empresas, el 97,7% de las españolas tiene conexión a banda ancha, siendo escasa la diferencia entre grandes y pequeñas empresas y con la media de la OCDE. Sin embargo, España tiene potencial para avanzar porque estamos alejados de otros países en indicadores como empresas con “website” o “home page”, uso de software de planificación de recursos o servicios de cloud computing. No obstante, hay que destacar que las empresas españolas de mayor tamaño están a un nivel muy alto y similar al de otros países de la OCDE, según el informe “Digital Economy Outlook 2015”.

Respecto al uso del comercio electrónico y del cloud computing en los consumidores, el crecimiento en los últimos años ha sido exponencial, aunque España se encuentra por debajo de la media de la OCDE. En este caso, las diferencias más acusadas se encuentran en la edad, siendo muy elevado el porcentaje de jóvenes que utilizan estos medios frente a otros segmentos de edad.

Desde CEOE, hemos estado trabajando en fomentar la I+D+i y la Economía Digital como herramientas fundamentales para la mejora de la competitividad, la generación de empleo y el crecimiento económico.

En concreto, en el ámbito de la economía digital se propone avanzar hacia la realidad de un Mercado Digital Único en Europa, velar por un modelo de Internet que sirva de base para apoyar el desarrollo de la Economía Digital, impulsar la Transformación Digital de todos los sectores productivos, perseguir la eficacia y modernización en las Administraciones Públicas, adecuar un marco regulatorio al comercio Electrónico, renovar y ampliar la base tecnológica instalada, desarrollar el esquema nacional de ciberseguridad y en cuanto a la educación, hay que fomentar nuevos perfiles profesionales digitales que permitan hacer frente a las nuevas demandas empresariales.