Cepsa ha puesto en marcha en la Refinería Tenerife dos nuevas calderas que le permiten ser más eficiente en la generación del vapor de agua necesario para la Planta. La eficiencia viene dada tanto por la reducción de emisiones como del combustible empleado.

La tecnología implantada permite reducir en más de un 35% las emisiones de CO2, SO2 y NOx asociadas a la producción del vapor requerido para satisfacer las necesidades actuales de la Refinería. Las nuevas calderas representan también una sustancial mejora de la eficiencia energética, ya que su implantación reduce en un porcentaje similar el consumo de combustible.

El vapor generado por estas calderas es empleado en mantener la temperatura de almacenamiento y de trasiego de ciertos productos, como fueles y asfaltos, que requieren estar calorifugados para su manejo.

Esta implantación, llevada a cabo tras superar satisfactoriamente las pruebas de aceptación a las que Cepsa somete a todas sus instalaciones antes de su puesta en funcionamiento, ha supuesto una inversión cercana a dos millones y medio de euros.

Esta solución para la generación de vapor complementa la actualización tecnológica llevada a cabo en el área de procesos con la puesta en marcha, en 2015, de una Planta de Ósmosis Inversa para la desalación de agua de mar.